Después de 45 años de carrera, Demi Moore finalmente ganó el premio a la mejor actriz en los Globos de Oro 2025 por su papel en “Cuerpos perfectos”. Gracias a su excepcional actuación y su encanto atemporal, ha vuelto a convertirse en el centro de atención. A sus 62 años, Demi Moore sigue teniendo una figura espectacular, lo que deja a muchos asombrados por su cuidado personal. Sin embargo, pocos saben que en su juventud se vio atrapada en un extremismo por el ejercicio en su búsqueda de un cuerpo perfecto. ¿Cómo logró superar su ansiedad por la imagen del pasado y aceptar su yo imperfecto en el presente?
45 años de hitos en la carrera cinematográfica
La carrera actoral de Demi Moore comenzó en la década de 1980, convirtiéndose en una de las actrices más representativas de Hollywood gracias a una serie de obras clásicas. A menudo menospreciada como una “estrella de películasm de palomitas”, su talento ha sido finalmente reconocido tras 45 años en la industria. Este año, obtuvo su primer premio como Mejor Actriz en la categoría de Musical/Comedia por “Perfect Material”, marcando un momento culmen en su carrera.
Desde ser considerada una “estrella de palomitas” hasta convertirse en la “Mejor Actriz” en los Globos de Oro, enfatizó en su discurso que la aceptación personal es fundamental. Mencionó que alguien le había recordado: “Debes entender que nunca serás suficiente, pero si estás dispuesta a soltar esa regla que te mide, podrás encontrar tu verdadero valor“, y animó a todos a creer en sí mismos y a ser valientes al ser quienes realmente son.
pasado miedo al cuerpo
Como madre de tres hijas, Demi Moore enfrentó inquietudes sobre su figura en las primeras etapas de su carrera profesional. Seis meses después de dar a luz a su segunda hija, Scout, recibió el papel en “La violencia del deseo”. En ese momento, enfrentaba una enorme presión por perder peso tras el parto; para volver a su figura de antes del embarazo, llegó a montar en bicicleta 90 kilómetros diarios e incluso a eliminar los carbohidratos de su dieta.
Demi mencionó en una entrevista que “las personas a mi alrededor me exigían que adelgazara”. Para cumplir con las expectativas externas, se fue imponiendo una presión constante, afirmando que no podía dejar de hacer ejercicio e incluso adoptó métodos extremos de entrenamiento y control de la dieta para alcanzar la figura ideal. Poco a poco, se vio atrapada por su imagen y peso, cayendo en un estado de ansiedad… Al reflexionar sobre todo lo que le hizo a su cuerpo en ese momento, admitió sentirse muy loca y graciosa.
Oportunidad de transformación
Demi menciona en su memoria publicada en 2019, “Inside Out”, que en 1997, al prepararse para filmar “G.I. Jane”, tuvo que aumentar de peso y músculo para interpretar el papel de un oficial. Durante este proceso, se dio cuenta de que su cuerpo había alcanzado su límite, y esta experiencia le hizo entender que “solo necesitaba mantener su figura natural”, lo que cambió por completo su perspectiva sobre su cuerpo. Más tarde, abandonó los estrictos regímenes de ejercicio y control dietético, y adoptó una actitud más relajada hacia su cuerpo. Este punto de inflexión permitió a Demi aceptar la imperfección de su cuerpo.
Liberarse de la obsesión y reconciliarse con el cuerpo
Con el paso del tiempo, Demi comenzó a prestar más atención a la salud mental, dejando de centrarse en los números y disfrutando de ejercicios aeróbicos de baja intensidad como el baile, el pilates y el yoga. Este cambio de mentalidad la ayudó a liberarse de la ansiedad del pasado y recuperar su amor por la vida.
Este año, Demi Moore, que tiene 62 años, mantiene su figura ardiente y sexy. De vez en cuando, comparte en las redes sociales fotos de ella luciendo un bikini, mostrando su gran cuerpo; además, también publica fotos disfrutando del sol junto a su perro, mostrando su atractivo saludable y seguro de sí misma.
Abrazar la ansiedad corporal y aceptar nuestra imperfección.
Desde la ansiedad extrema por la imagen corporal hasta la confianza en la belleza, Demi enfatiza que “la verdadera confianza proviene de aceptar nuestras imperfecciones”. Cada persona debería valorar su singularidad y aceptar su lado imperfecto. No importa la edad, siempre se debe mantener un estilo de vida saludable y una actitud positiva. La historia de Demi no solo la ha inspirado a ella, sino que también alienta a todos a atreverse a aceptar y amar su yo más auténtico.